Los paseos NO son solo para el disfrute de tu mascota. El paseo es una actividad donde la comparten 2 protagonistas; Tus mascota y por supuesto, Tú.

Ninguno de los 2 debe terminar estresado, cansado o decepcionado de esta actividad, sino todo lo contrario, sentirse satisfechos y complacidos por el respeto, la guía y la confianza que se refleja en el vínculo que forman al pasear.

Recuerda que el paseo se estructura en:

1.- Guía y control: Es el momento donde diriges, tu perro te acompaña, se mantiene a tu ritmo, aprende de tí y respeta el entorno que lo rodea, sin jalar, ladrar o cualquier conducta ansiosa. OJO que no quiere decir que tengas al perro condicionado o limitado, sino más bien equilibrado para afrontar cualquier situación.

2.- Libertad y diversión: Claro, un paseo debe rescatar en fomentar la naturaleza del perro, cómo olfatear, revolcarse, correr, morder, perseguir e incluso guiar. Aquí el perro tiene tiempo libre para ser quién es: Un perro.

Recuerda que depende de ti hacer del paseo una actividad digna de repetir a diario.