
En este episodio hablamos de una verdad que muchas veces se oculta detrás de sonrisas y palabras de fe: la depresión también puede habitar en hogares cristianos.
Exploraremos cómo identificar las señales de alerta, derribar los mitos que rodean la salud mental en la iglesia y recordar que padecer depresión no es sinónimo de falta de fe.
A la luz de la Palabra, compartiremos como Cristo sigue siendo nuestra esperanza, nuestro refugio y nuestro sanador, aun en medio de la oscuridad emocional.