
Su paciencia, perseverancia y oraciones, transformaron milagrosamente los corazones de su familia. Tuvo un esposo iracundo, una suegra que no la querÃa y un hijo muy rebelde.
Santa Mónica, fue una mujer optimista, obediente que amaba profundamente a Dios. ¡Conoce su vida en esta cápsula! Seguro te gustará tanto como a nosotros.