
No siempre te vence la vida, las circunstancias o los demás. A veces, te vences tú mismo cuando eliges el silencio por comodidad, miedo o validación. En este episodio hablo de cómo guardar silencio en momentos clave puede costarte más de lo que imaginas. Callar no siempre es madurez; a veces es falta de valor. Y cuando no valoras lo que crees, es fácil terminar aceptando lo que no quieres.
Ep.161- El Peso de las ExpectativasEp. 260- De ¿Dónde Proviene Tu Fuerza?
Se necesita mucho crecimiento, mucho desarrollo personal, para mantenerte firme.
Se necesita mucho desarrollo personal para mantenerse callado en los momentos adecuados, porque quedarse callado por cobardía no cuenta como desarrollo personal.
Ni quedarse callado para mantener las cosas en paz, cuando lo que en realidad se esconde atrás de eso es que no tienes el valor para defender lo que crees que es correcto para ti.
A veces nos dejamos vencer cuando nos ponemos en descuento.
Quiere decir que nosotros no nos valoramos a nosotros mismos y, aún así, estamos esperando que lleguen personas y nos valoren.
Eso es como si te pusieras en descuento, y luego te quejas de que alguien no quiere pagar el precio normal.
Pero si tú mismo estás evaluándote de forma incorrecta…
Una de las formas en las que yo me dejé vencer era porque me ponía en descuento.
A veces permitía que las reglas, los comentarios, las perspectivas de otras personas dictaran en cierto grado mi relación con esa persona —e incluso, tremendo error— a veces las decisiones que yo tomaba para recibir validación, para sentirme querida, para saber que la estaba logrando en la vida…
Y al final, la cosmovisión de otra persona nunca te va a satisfacer a ti.
Tu cosmovisión es la que te va a satisfacer a ti.
Lo que tú crees.
Lo que sueñas para ti.
Lo que tú crees que es correcto.
Lo que tú crees que estás haciendo bien.
Como te lo dije, una de las mayores formas en las que nos ponemos en descuento y no nos damos el valor que merecemos es cuando nos quedamos callados.
A veces uno no está hablando con una persona que está abierta a entender que no tiene la razón.
A veces estás hablando con una persona que es importante para ti en algún sentido, y tienes miedo de que te rechace. Incluso podría ser un jefe.
A veces estás hablando con una persona que se porta políticamente correcta, pero que realmente no tiene una buena relación contigo.
Y entonces, en esos casos, es mejor guardar silencio.
A veces es mejor guardar silencio, pero no cuando compromete las cosas que para ti son importantes.
No te dejes vencer.
Y estoy hablando de los valores que están dentro de uno.
Los valores que tienes determinan la persona que eres.
Ya hablamos en un episodio anterior: 265- Si No Reflexionas, No Accionas
Es necesario reflexionar.
Reflexionar te va a permitir saber quién eres y lo que quieres.
No hay atajos para eso.
A veces la gente pasa la mayoría de su vida sin reflexionar.
Y lo que aprende de sí mismo lo aprende a través de los años —lo cual no está mal— pero, pudiendo haber vivido una vida más plena desde antes, no lo hacen porque no reflexionan, porque no se dan el tiempo.
Entenderte te va a permitir tomar mejores decisiones.
Valorarte a ti primero, antes de estar buscando que otra persona te valore.
Recientemente estaba hablando con una amiga.
Me di cuenta que las cosas que queremos para nosotras a veces están a la distancia de una decisión tajante.
No estoy hablando de una comunicación que sea determinante, grosera, firme, de modo que la otra persona vea “por fin con quién se metió”, ¿no?
Estoy hablando de que se decide en el interior de forma determinante, de forma tajante, y luego la comunicas con la seguridad de que sabes que es lo mejor para ti.
A veces lo mejor para uno no es alcanzar la estrella a toda costa.
A veces lo mejor para uno es no caer en un bache.
No todas las decisiones que tomamos te llevan a la cima.
Hay decisiones que tomas que te evitan el fango.
Y hay que tener el valor para..