
Estos fragmentos se basan en las Meditaciones (Ta eis heautón) de Marco Aurelio Antonino Augusto, el último de los grandes emperadores Antoninos de Roma. Esta obra, compuesta en griego, no fue escrita para otros, sino para sí mismo, constituyendo los apuntes de un diario personal y un testimonio sincero y hondo.
Contexto de Creación
Marco Aurelio, quien gobernó entre el 161 y el 180 d.C., tenía todo el poder y la riqueza, pero buscaba la paz interior. Escribió estas reflexiones durante sus últimos diez años, muchas veces en campaña, en medio de guerras dilatadas contra los pueblos bárbaros y bajo la amenaza de la peste que golpeaba el imperio. Estas notas filosóficas adquieren una dimensión dramática definitiva debido a su trasfondo biográfico.