
¿Sabes por qué te enojas y reaccionas muy mal a ciertas cosas? Cuando llegamos a este mundo llegamos perfectos, nuestro entorno, nuestros padres, amigos, experiencias, etc., nos configuraron con base a sus creencias y las sembraron en nuestra mente. Todos los seres humanos tenemos huellas emocionales a partir de cómo percibimos la realidad, surgen por experiencias de alto impacto emocional, físico y mental que nos hicieron desarrollar conductas para sobrevivir, a estos impactos se les llaman BIOSHOCKS.
A veces estas heridas obedecen a un pasado infantil realmente traumático. Otras veces, en cambio, se deben a distorsiones en la interpretación de la realidad por parte del niño. Debemos recordar aquí que los niños son muy buenos captando impresiones y teniendo sensaciones, pero muy malos interpretándolas.