
Cuando hablamos de flujos de energía y consentimiento debemos revisar intención y atención, porque ellas pueden orientar la energía en diferentes direcciones. Por ejemplo, yo puedo tener la intención de terminar de hacer algo, pero si mi atención está distraída por otra cosa, voy a tener la intención de hacer una cosa y hacer otra. Descubre más en ► Mercedes Laporta