
La felicidad es un estado del ser, una sensación profunda de bienestar y satisfacción. No es un destino fijo, sino un camino que se construye día a día. Muchas veces creemos que está en las cosas grandes o en logros lejanos, pero la felicidad suele encontrarse en los pequeños momentos: una sonrisa, un abrazo, un instante de calma o un atardecer.