
Desde muy pequeños juzgamos.
Es algo natural que desde los primeros hombre lo hacian para ver si la gente de la otra aldea o tribu podían confiar en ellas o eran amigables.
El ser humano juzga bajo imagen, bajo la delgada capa de la superficie.
Pero lo valioso de cada ser humano está en su historia y conocer la historia de las personas es lo que en verdad genera relaciones duraderas, genuinas y llenas de amor y empatia.
Deja de ser el peor juez. NO CONOCES NADA de lo que hoy juzgas más seguido.