
Seguimos el camino planteado, hacer de la historia del rock mexicano, un verdadero reencuentro con su pasado. Bien pasado, le digo, porque hubo de todo y el resultado cambio totalmente la consagración del rock mexicano, a la llegada de internet a México, cientos de bandas dejaron de existir porque se los chupo la bruja. Paso en el mundo entero, pero en México, no fue agradable ver caer a los grupos que entusiasmados grabaron para ROCKcastellano. les duro poco el sueño del éxito, mi respeto, lo intentaron a diferencia de otros cientos de bandas que se quedaron con su DEMO casete. Grabe el 80% de las entrevistas que escucharas en este programa, episodio, podcast. Grabar con medios digitales no me dio confianza, acerté, fallaron. Trabajar con una grabadora de mano, portátil, de casete, buena marca, SONY, me permitió tener horas de cinta magnética y desde que empezamos a andar, la alimente con casetes lo cual la hacia feliz y me acompaño hasta mi retiro de las filas del rock mexicano. Funciono perfecto, no dio lata, no se descompuso, solo hizo lo que sabia hacer, grabar chido, lo demás lo hacia yo. Como dice Café Tacuba en su canción Futuro ... Es algo que Dios ya decidió. El material grabado lo transfería por medio de una consola minidisc de seis canales, micrófono, dennon de casete y CD, un reproductor de cinco discos compactos, un procesador de voz y un reproductor de minidisc. Grababa secciones, era un arte, puro oído, le saque provecho a mis orejas. Editar con una perilla circular, basada en números, digital, izquierda, derecha, cortar, unir, SALVAR, y post producir, la entrevista, saludo o presentación de canción para programarla y transmitirla en muchas ocasiones, infinidad de veces por la radio FM.
Años en el corazón del rock mexicano viviendo intensamente cada día, con LA GRABADORA de pilas AA ... detrás de la acción ... algo que se convirtió en una adicción encontrando siempre, una reacción inmediata, al foquito rojo, que te decía sin hablar ...que empieces a grabar.