
El perfume de lo invisible… Transcurría el año 1989, en ese momento pasaba mucho tiempo en la FM Andina, de San Rafael. Era el búnker y sala de ensayo de nuestro proyecto musical por ese entonces. Todo era mágico: las charlas, las mateadas y poner música de discos de vinilo; seré un nostálgico, pero era otra cosa, desde el sonido, al arte de tapa, contratapa y la info del sobre, las fotos, los datos de la banda y de la grabación, etc. No nos olvidemos que por esos tiempos las fuentes eran infinitamente menores que en la actualidad. De todas maneras, nos rebuscábamos bastante bien ante tanta carencia de información. De repente, empezó a sonar un piano con un dulce encanto, me sorprendió mucho y pregunté: y esta banda??? Raivan Pérez, me respondieron. Era la canción Viejas Campanas. Inmediatamente me puse a investigar todo sobre la banda y disfrute mucho de escuchar el disco completo. No solo no tenían nada que envidiarle a lo que sonaba en ese momento sino que lo hacían mucho mejor que la mayoría. A partir de ese momento, nació mi admiración por esa gran formación. Si bien pisaron grandes escenarios del circuito porteño y del interior, ej. el Chateau Rock, solamente por esas cosas que tienen la vida y el destino, no llegó a ocupar el merecidísimo lugar que le hubiese correspondido de pleno derecho en la escena del rock nacional. Es un enorme placer presentarles como invitado de hoy al Sr. Dario Ghisaura: