
Quisiéramos hacer sólo aquellas cosas que nos agradan y producen satisfacción; pero muchas de las acciones de esta vida son responsabilidades. Cosas que tenemos que hacer. Desde los primeros años que no enseñaron a comer verduras y atarnos los zapatos para luego ir a la escuela muy temprano en la mañana, tuvimos que hacerlo.
La mayoría de las ocasiones no queríamos, pero teníamos que. Pareciera que madurez es realizar lo que tienes que con prontitud y sin queja, incluso disfrutándolo a voluntad.