El camino del perdón es cuesta arriba, es un trabajo personal desde mi interior, que yo me regalo porque me amo y me lo merezco más que nadie, independientemente del otro. El Dolor enseña, la Bendición libera y la Reparación transforma.
Perdonar comienza con comenzar a subir para encontrarme con mi dolor, declararlo, expresarlo, como la emoción que es y Reconocerla, hago consciente lo inconsciente para liberarme.
"Lo que acepto me libera, lo que niego me somete."
Subo más para trascender a mi liberación, lo Bendigo y me hago Responsable porque aprendo y sigo subiendo para encontrar la Reparación como un acto de puro amor, puedo servir de alguna manera, creo un acto de AMOR para reparar un acto de NO AMOR.
Show more...