
En el siguiente episodio presentamos la formación de los reinos cristianos tras la rápida conquista musulmana de la península ibérica. Los núcleos de resistencia al Emirato dependiente de Damasco se organizan en torno a dos zonas montañosas: la cordillera cantábrica y los Pirineos. En este espacio geográfico surgen pequeñas formaciones políticas, algunas dependientes del Imperio Carolingio -la denominada Marca Hispánica-, que se irán expandiendo paulatinamente hacia el sur aprovechando los momentos de debilidad del Estado andalusí.