
¿Has notado que la vida está repleta de decisiones? Por cierto, se podría decir que, en gran medida, lo que hacemos todo el día, desde el momento en que nos levantamos hasta que nos acostamos, es tomar decisiones. Tomamos tantas decisiones que a menudo ni siquiera pensamos en ellas. Simplemente, las tomamos. Algunas decisiones son sencillas y hasta se convierten en rutina, mientras que otras son transformadoras y tienen consecuencias eternas, no solo para nosotros, sino también para nuestra familia.