
Los libros son los juguetes más valiosos de las sociedades, con ellos cronstruyen puentes entre la cultura pasada y la que está por venir. Es por eso que los saqueos a las bibliotecas en tiempos de guerra, los incendios que han sufrido son una tragedia incalculable.
Rolando Kattan, uno de los poetas hondureños que posee, posiblemente, la mayor biblioteca de su país ha sido invitado por nuestro programa para que nos cuente sobre su biblioteca y su perspectiva de la labor que han tenido los libros en su éxito como poeta de orden mundial.
El Dato Rosa, nos trae una interesante información sobre libricidios en la historia de la humanidad y algunos otros venenos. En tanto Rosa Espinoza (que sigue con paradero desconocido) ha sido reemplazada por la IA. No será un encanto como ella, pero es más económica.
En el consultorio poético le preguntamos a nuestros seguidores , qué libros salvarían de sus bibliotecas y recibimos respuestas inesperadamente teológicas.
En la bitácora ruculista desvariamos con una serie de críticas sin sentido y enconos inmerecidos respecto al peso, valor económico y cuantitativo de nuestras bibliotecas quemadas por nuestros ojos cansados de releerlas.
Un poeta sin biblioteca es como un cerdo sin charco.