
La oración es la manera de poner a Dios en el principio. Y si en tu vida conservas este principio, será una historia de victoria, tal como lo fue la de David. Salmo 16:8. Al iniciar el libro de los Jueces vemos que Israel practicó el consultar a Dios para la toma de decisiones y obtuvo buenos resultados. Volvamos al principio de tener a Dios en el principio.