
“El pronóstico dice tormentas”, repite Peligroso. En este capítulo nuestro protagonista atraviesa una montaña rusa de sensaciones. Amanece en un bola de fuego que lo consume todo a su paso. Su amigo se convirerte en cenizas, el botín del asalto queda todo quemado y su relación con Paula se hizo polvo. Es entonces que Peligroso quiere reinventarse y para ello vuelve al barrio que lo vió nacer. La casita de los viejos está un tanto cambiada y el calor del hogar se transforma en una nueva bola de fuego. Escuchemos las imágenes.
Producido por DMC STUDIO.