
Ser una persona optimista y positiva solo tiene ventajas, ¡es así! Te sientes mejor, superas con más facilidad las dificultades, te conviertes en un imán para las cosas buenas... creo que no hace falta convencerte de esto. Por eso, hoy vengo a hablarte de algunas estrategias que yo uso en mis momentos de bajón para ver el mundo un poquito más de color de rosa. Si a mí me sirven, seguro que también te ayudan a ti.
Puedes seguirme, hablarme y contarme qué te ha parecido en mi perfil de Instagram. ¡Y no olvides compartir este episodio con esa amiga que siempre está con cara de malhumorada! Además, si quieres leerme cada luna en tu email, puedes apuntarte aquí.