Kelly está obsesionada por encontrar el amor, y una vez más lo busca en la persona equivocada, Antonio, un hombre vividor y manipulador, a quien solo le interesa el dinero que ella le proporciona por un supuesto local para la venta de tequila. Antonio hace lo posible para que Eva no tenga un acercamiento con su madre, y la hacer pasar como una mala chica, cuando la pequeña solo busca la comprensión y el apoyo de su madre. Kelly obliga a su hija a que asista a la clase de yoga con Elías, su guía espiritual, quien no es más que otro estafador que abusa de las chicas “conflictivas” que le envían para que las guie y oriente. En la clase Eva conoce a Andrea y a Siena, que al igual que ella sus padres las consideran chicas problemáticas, pero ellas han encontrado una forma diferente de sobrellevar su dolor y rechazo, pues utilizan cúter para herirse cada vez que lo creen necesario. Pero gracias a que Kelly reacciona a tiempo logra salvar a su pequeña y ésta a su vez salva a sus queridas amigas, demostrándoles que es posible salir adelante con ayuda profesional y apoyo.