
Él es un maestro. En todos los sentidos de la palabra. Etimológicamente MAESTRO tiene un sentido implícito: de magistrum = MAYOR (más grande). Él es grande. Muy grande. Niñas y niños lo adoran. La enseñanza es su profesión y la practica 24/7. Él se pregunta constantemente sobre nuestra comprensión del acto de enseñar y del acto de aprender. Él cree que el amor es la transformación definitiva, y que enseñar a enseñar a aprender es muy importante. Él es abono y no tutor. Es generoso, solidario y sabe escuchar. Lucha por una educación que nos enseñe a pensar y no por una que nos enseñe a obedecer.Él es un estimulador de los sueños imposibles. Él es un convencido de que la palabra pedagógica cura. Él se llama José Ignacio Marull y es nuestro querido maestro.