
Narrado por Montse Sabajanes, la bischita
Dicen que los objetos no sienten, que no recuerdan. Pero ¿y si una simple moneda pudiera contarte todo lo que ha visto?
En este segundo episodio, te traigo la historia de una moneda dorada que ha cruzado generaciones, bolsillos y promesas. Nació entre el bullicio de un mercado y terminó en la palma temblorosa de un niño con los ojos llenos de sueños. A lo largo del tiempo, fue mucho más que metal brillante: fue deseo, esperanza, refugio… y, sobre todo, memoria.
💛 La Moneda Viajera no habla de riquezas, sino de lo que realmente vale la pena guardar. De esos objetos que, sin decir palabra, nos sostienen cuando todo parece caerse. De los recuerdos que se heredan como si fueran joyas invisibles.
Cierra los ojos. Escucha. Quizá tú también tengas una moneda así, escondida en algún rincón de tu historia.