
Esta nueva etapa es el inicio de un proceso de entusiasmo que nos trae felicidad. Después de haber entendido nuestras cegueras cognitivas y de tomar conciencia de los recuros y de las debilidades que portábamos, logramos hacer un diágnostico mas real de nosotros mismos.
Ahora, si logramos comprometernos con nuestro aprendizaje, vemos los beneficios de la práctica diaria. Construimios mejores hábitos, decidimos sobre nuestra propia agenda, nos priorizamos. De esta forma empezamos a transformarnos en mejores líderes de nosotros mismos y de otras personas.