
En este episodio hablamos de ese llamado profundo que Dios hace a sus hijos: “Sube acá” (Apocalipsis 4:1). No se trata de una invitación común, sino de una orden divina que nos saca de la rutina, del valle, y nos eleva a una dimensión espiritual donde podemos ver con claridad lo que Él quiere mostrarnos.
Descubre cómo esta palabra transformó la vida de Juan y cómo hoy también puede ser un punto de inflexión para ti. Porque no subimos por posición, subimos por relación. No se trata de estatus, sino de intimidad con Cristo