
Harley Quinn siempre fue más que una villana.
Fue una mente brillante que se quebró buscando amor… y encontró locura.
En Joker: Folie à Deux, su historia deja de ser solo la de una mujer “loca por amor” y se convierte en algo mucho más inquietante: una mente que se enamora del delirio.
En este análisis psicológico exploramos cómo la codependencia, la necesidad de validación y la pérdida de identidad se mezclan hasta borrar la línea entre amor y enfermedad.
¿Dónde termina la pasión y dónde comienza el trastorno?
¿Es Harley una víctima del sistema… o de sí misma?