
Harrison Morgan no es el hijo de un monstruo… es el hijo del trauma.
Después de crecer bajo la sombra de Dexter, su historia en Dexter: Resurrection nos muestra lo que sucede cuando la oscuridad se hereda, pero nadie enseña cómo controlarla.
En este análisis psicológico exploramos la mente de Harrison: su culpa, su rabia, sus alucinaciones… y la eterna lucha entre la herencia y el libre albedrío.
¿Puede alguien con sangre de asesino realmente ser bueno?
¿O el trauma siempre termina por devorarnos?