Dios sigue siendo el mismo, Él no ha cerrado sus oídos ni ha olvidado su promesa a nosotros.
Tu área más dañada es el blanco perfecto para un milagro.
Durante el mes de julio nos adentramos en el Evangelio de Lucas, donde descubrimos a Jesús en su humanidad: el Salvador universal, compasivo, amigo de los marginados y el ungido de Dios.
Esta no es solo una historia de sanidad, es una historia de restauración.
Jesús lo cambia todo, todo lo hace bien.
Marcos 2:12: "Entonces él se levantó en seguida, y tomando
su lecho, salió delante de todos, de manera que todos se
asombraron, y glorificaron a Dios, diciendo: Nunca
hemos visto tal cosa”
Hemos sido los dichosos receptores de una herencia maravillosa, eterna y poderosa pero, al mismo tiempo, hemos sido designados como los agentes que compartiremos esa herencia con todos.
Jesús no es parte de la historia: Él es el autor de la historia.
Busquemos a Dios siendo nosotros mismos los gestores de ese movimiento, no esperemos que alguien o algo nos empuje. Seamos gestores de ese avivamiento.
A partir de hoy, emprendemos un camino de reconstrucción, obediencia y del gozo verdadero que solo Jesús nos da.
Una iglesia de puertas abiertas: actuando, intercediendo y siendo ejemplo.
Dios nos llama a escuchar el clamor de los necesitados, reflexionar sobre nuestra respuesta, actuar con justicia y comprometernos con la restauración.
Finalizamos la serie "Elementos" preparándonos para compartir la esperanza del evangelio con los demás. Este elemento es vital en nuestra vida como seguidores de Jesús. ¡Él nos llama a ser y hacer discípulos!
El siguiente elemento que estudiaremos es el descanso, un concepto que vemos desde el inicio de las escrituras y que es parte del corazón de Dios para nosotros.
El Fruto del Espíritu Santo se ve manifestado en nuestra vida, a través de nuestro carácter. Reflexionemos juntos en este otro elemento fundamental para nuestro caminar con el Señor.
La comunidad es un elemento vital en nuestro caminar con el Señor, este es el primer tema de la segunda parte de nuestra serie "Elementos".
¡La vida en nosotros llegó gracias a la Resurrección de Cristo Jesús! Acompañanos en el cierre de esta serie tan especial.
Continuamos con la serie "Vida en mí" y en esta oportunidad recordamos que Dios es amor y que nos trae salvación.
Podemos experimentar la vida abundante que Jesús nos dio, al permitir que Dios nos transforme en nuestra mejor versión. Esa vida que nos hace pasar de creyentes a discípulos.
Seguimos reflexionando en el regalo de Jesús en la cruz, y en esta ocasión, lo haremos enfocándonos en la vida que Dios pone en nosotros y cómo esta debe fluir hacia afuera de nosotros.