
El estrés tiene mala fama… pero la verdad es que a veces lo buscamos. Nos hace sentir productivos, enfocados, hasta vivos. Pero cuando se vuelve constante, empieza a pasar factura: dolor, insomnio, cansancio profundo.
En este episodio hablamos de esa adicción silenciosa al rush del día a día, y de cómo iniciar a vivir desde la congruencia: una en donde encontremos el equilibrio, porque sí, el estrés empuja... pero también rompe.
Y no estamos aquí para rompernos, estamos aquí para disfrutar.