
La resiliencia se define típicamente como la capacidad de recuperarse de eventos difíciles de la vida.
La resiliencia es como escalar una montaña sin un mapa. Se necesita tiempo, fuerza y ayuda de las personas alrededor, y es probable que se experimente contratiempos en el camino. Pero eventualmente se llega a la cima y mirando hacia atrás se ve lo lejos que se ha llegado.