Tras la condena que lo dejó fuera de las elecciones en 2018, el ex presidente vuelve a disputar el poder. Pasó 580 días en la cárcel, perdió a su mujer y su nieto, y atravesó un proceso judicial que tardó más de dos años en probarse viciado. Reivindicado, Lula vuelve con una alianza amplia hacia la izquierda y la derecha, resultado de un cambio en el escenario político. ¿Cómo sería una nueva gestión de Lula dos décadas después de su primera victoria? ¿Por qué él de nuevo?
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