Nuestro encuentro fue lo más parecido a estar en casa tomándonos un té verde. Ese rato entre vecinas que llevan tiempo buscando hueco para verse y la vida corre tanto que, sin darte cuenta, lo dejas más tiempo del que te gustaría. Una historia que empieza con un audio que me dejó claro que iba a ser una invitada perfecta, que entendía perfectamente el significado de "ojalá" y que ha sido tan generosa como esas personas que la quieren, admiran y respetan a partes iguales. Tanto como ella a ellos. Hablamos de proyectar, de vivir el presente, de no juzgar y de aprender de todo continuamente. Y reímos, porque con ella siempre se ríe. Gracias por este regalo de entrevista, Melani.

*La Ley del Ojalá se graba en un ventanal a Gran Vía en Hyatt Centric (Madrid)

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