
Perdida la España, disuelta la monarquía, rotos los vínculos políticos que la unían con las Américas, y destruido el gobierno que había organizado la Nación…no hay remedio. Los reinos y provincias que componen estos vastos dominios son libres e independientes, y ellos no pueden ni deben reconocer otro gobierno ni otros gobernantes que los que los mismos reinos y provincias se nombren y se den libre y espontáneamente… según su necesidades, sus deseos, su situación, sus miras políticas, sus grandes intereses y según el genio, carácter y costumbres de sus habitantes. Camilo Torres.
Este podcast fue posible gracias al apoyo del Ministerio de Cultura y la convocatoria "Comparte lo Que Somos"