
Sin suerte y con demasiados problemas, nuestro grupo de aventureros se oculta de sus perseguidores. Uno de ellos robó —o obtuvo por error— algo muy valioso para una poderosa organización de la ciudad que ahora los persigue por su hallazgo. Su asombro crece cuando descubren que en sus manos no hay solo un botín, sino un mapa: el que guía a las profundidades de Kaeldra. Las leyendas hablan del tesoro oculto bajo sus calles, en las mazmorras antiguas que el mago élfico Eryndel talló con magia. Sin tiempo para pensar, resuelven el primer acertijo y encuentran la entrada secreta, justo a tiempo para no ser atrapados. Pero no fue la suerte lo que los salvó… sino la mayor de las desgracias.