
En este mensaje, el Pastor Roger Arcila nos recuerda que, en medio de nuestros pensamientos y cargas diarias, podemos perder de vista a Jesús. Sin embargo, al igual que los discípulos en el camino, Él se revela de manera inesperada y transforma nuestras vidas.La tristeza no siempre es un enemigo: muestra nuestra necesidad de Dios.Nuestro destino final es esta.Todo lo que hacemos debe tener un mismo propósito: darle la Gloria a Dios.