A medida que avanzamos bajo el signo de Géminis y la Luna entra en su fase creciente, se abre una semana decisiva para orientar de forma consciente el hilo del pensamiento. Para ello, es fundamental incorporar técnicas místicas o contemplativas que permitan aquietar la mente.

Esta semana favorece el fortalecimiento de los lazos sociales y el intercambio con los demás. Es un tiempo ideal para difundir ideas, promover proyectos o productos, y diversificar nuestras acciones, aprovechando la ligereza geminiana y el dinamismo lunar.

Este horóscopo se basa en el rápido tránsito de la Luna por los signos y ofrece una serie de claves que contemplan diversos escenarios de la vida individual. Es un momento propicio para reconocer el valor de apartarse, no solo de lo que no nos pertenece, sino también de aquello que nos daña, nos limita o nos mantiene atrapados entre el pasado y el futuro.