
Slender Man es una figura alta y aterradora, con extremidades anormalmente largas y un rostro completamente en blanco, sin rasgos. Desde su aparición en foros de internet en 2009, ha crecido hasta convertirse en una de las leyendas urbanas más aterradoras. Se le describe como un acechador que persigue a sus víctimas, especialmente niños, atrayéndolos hacia los bosques, donde desaparecen sin dejar rastro.
Según las historias, Slender Man puede hipnotizar a sus víctimas, haciendo que lo sigan sin darse cuenta. Aquellos que lo ven sufren de paranoia, pérdida de memoria y una sensación constante de ser vigilados. Numerosos relatos cuentan cómo Slender Man aparece en el fondo de fotografías o videos, siempre al acecho, hasta que finalmente se lleva a su presa.
A lo largo de los años, esta figura ha generado una vasta cantidad de relatos, videos y juegos que mantienen viva la leyenda. Lo que comenzó como una creación de internet se ha convertido en un mito moderno del terror, recordándonos el poder que tiene el miedo colectivo para dar vida a nuestros peores temores.