
Es una herramienta para fomentar relaciones sanas con base en una comunicación simétrica, asertiva y empática.
hablar y escuchar con esa conexión compasiva y natural. Ayuda a identificar una situación, a reemplazar las reacciones programadas de juicio y defensa, y a expresar lo que realmente necesitamos o necesitan otros de la situación.
Lo hacemos para enriquecer la vida de otras personas. Al hacerlo de forma sincera sentiremos crecer nuestra autoestima. Es un beneficio para el que da y para el que recibe.