
En primer lugar, la existencia de tumores con influencia hormonal puede provocar que la mujer tenga trastornos en su ovulación y así ciclos menstruales irregulares, con lo que se reducen las posibilidades de embarazo; y los tumores benignos sin influencia hormonal, de acuerdo con su ubicación pueden impedir la implantación del embrión en el útero.
Además de los cambios hormonales que influyen en la fertilidad de una mujer con cáncer, el estrés es un punto muy importante, así como los tipos de tratamientos que se consideren para tratar la enfermedad como cirugías, radioterapia, quimioterapia y terapias hormonales.