
En el episodio 7 de EUMprendedores charlamos con nuestro alumni Lucas Amat, una persona con una de las historias de reconversión más radicales que conocerás nunca. A los 18 años escapó de casa y se pasaba todo el día en la calle pintando grafitis, escapando de la policía y metiéndose en problemas, hasta que tocó fondo y se dio cuenta que ese no era el camino.
Empezó a monetizar su pasión pintando persianas de negocios, hasta que abrió su propia empresa de grafiti profesional. Más adelante, se inició en el sector de los infoproductos y logró facturar 150.000€ en los 7 días de un lanzamiento. El resto, dejamos que te lo cuente él mismo, disfruta de su historia.