En la vida tenemos la oportunidad de conocer infinita cantidad de personas, pero conseguir un buen amigo, a veces no es fácil. Y no lo es por nuestra tendencia a dejarnos llevar por la desconfianza, por ser posesivos o por no ser honestos. Pero debemos buscar amistades de calidad.
También necesitamos aprender a ser nosotros mismos a ser esos amigos de calidad. Que nuestras amistades sepan que pueden contar con nosotros, que somos honestos y que los acompañaremos en todo momento. Aunque sea de lejos, estaremos pendientes, con una llamada, un mensaje, un detalle que enviemos.
Proverbios 17:17 (RVR 1960)En todo tiempo ama el amigo, y es como un hermano en tiempo de angustia.
Las amistades pueden llegar a ser, en muchos casos, más que la familia. Pues a veces la vida nos aleja de la familia llevándonos a otros países, y nuestros nuevos amigos, o vecinos se convierten en las personas más cercanas con las que contamos. Sepámoslas apreciar y prestemos atención debida a nuestras amistades de calidad.
La Biblia está llena de sabios consejos para todo en esta vida. Y conseguimos consejos sobre las amistades que nos pueden afianzar en esas relaciones. Busquemos, estudiemos y hagamos lo que nos indica la Palabra de Dios.
Proverbios 27:10 (NTV)Nunca abandones a un amigo, sea tuyo o de tu padre. Cuando ocurra la calamidad, no tendrás que pedirle ayuda a tu hermano. Mejor es recurrir a un vecino que a un hermano que vive lejos.
El ser humano no fue creado para vivir aislado y en soledad. Debemos buscar compartir con otros y fortalecernos con la compañía que escojamos. Por eso necesitamos cerciorarnos de que sean de calidad. Las personas honestas, dispuestas a ayudarte, son valiosas y son las mejores amistades que podremos conseguir.
Por lo general, el versículo que les voy a ofrecer a continuación lo usan para los matrimonios, pero sirve perfectamente para las amistades. Si en una amistad, incluimos a Dios, oramos por nuestra amiga o amigo, la relación será bendecida y más fuerte. Seamos y busquemos amistades de calidad.
Eclesiastés 4:12 (RVR 1960)Y si alguno prevaleciere contra uno, dos le resistirán; y cordón de tres dobleces no se rompe pronto.