
Siglos antes de santa Margarita María, los Padres de la Iglesia ya contemplaban el Corazón de Cristo como fuente de amor, salvación y vida para la Iglesia.
Con Pío XII y el Papa Francisco, descubrimos que esta devoción nace en el corazón mismo del cristianismo y nos llama a ser fuentes de agua viva para los demás.
🙏 Sagrado Corazón de Jesús, en vos confío.