
En este primer episodio de Ejercicio de Perfección y Virtudes Cristianas, nos adentramos en el punto de partida de toda vida espiritual: el deseo de santidad.
El padre Alonso Rodríguez enseña que la perfección no comienza con grandes obras, sino con un deseo humilde y perseverante de agradar a Dios. Ese anhelo, cuando es sincero, ya es fruto del Espíritu Santo que mueve el corazón hacia el bien. Descubre cómo mantener viva esa llama interior que transforma lo ordinario en camino de santidad.
Comenta: ¿Cuál ha sido en tu vida una experiencia concreta en la que sentiste nacer o renovarse tu deseo de ser santo?