
En este episodio, nos sumergimos en la historia de Meritxell, quien decidió emprender una aventura en solitario al océano Pacífico de Costa Rica, participando en un proyecto de conservación de tortugas marinas. Aunque partió sola, rápidamente descubrió que los caminos del voluntariado están llenos de personas con quienes compartir experiencias.
Descubre paises para ir de voluntaria
Desde las costas de Panamá hasta las montañas de Perú y los paisajes de Bolivia, su viaje en solitario fue, en realidad, una travesía llena de encuentros inesperados, amistades espontáneas y momentos compartidos con voluntarios, locales y viajeros.
Acompáñanos en este episodio para descubrir cómo viajar solo no significa estar solo, sino abrirse a un mundo de conexiones inesperadas. ¿Es posible que el destino nos cruce siempre con las personas que necesitamos? Meritxell nos comparte su experiencia y reflexiones.
🎧Dale play y descubre cómo la soledad en el viaje puede convertirse en una compañía infinita.