
Uno de las tareas más difíciles de un negocio es poner precio a tu producto o servicio. Estudias el mercado y te das cuenta de que el precio en sí de algo es irrelevante. El mismo producto puedes encontrarlo por muy diferentes precios. ¿Cómo es posible?
Bien, el precio es una característica o cualidad más, es una etiqueta que ponemos a nuestro producto o servicio, y puede estar determinado por factores diferentes.
Sea alto o bajo tu precio, si tu cliente no compra tu producto/servicio, no es un buen precio. Hoy te hablo de los precios desde una perspectiva diferente, la de tu cliente.