
Entre los bosques donde el viento no tiene nombre,
despierta cada catorce lunas la vieja bruja: Babayaga.
Ojerosa y arrugada como los cadáveres de los robles,
camina entre sueños y neblinas cantando a los insomnes,
su voz un poema de hechizos y pesadillas.
En esta entrega del Sendero de la Mano Izquierda,
escuchamos el poema maldito que da vida a la más antigua de las brujas.
No la llames por su nombre.
No mires su casa de patas de gallina bajo la luna roja.
Si la ves… corre.