
El tal Koldo no es más que un mamporrero de la política que vio la oportunidad de lucrarse y lo hizo. Pero esa figura fue creada y engordada, nunca mejor dicho, por otros individuos como Santos Cerdán, el nuevo fontanero del PSOE, y su antecesor en semejante puesto, el otrora ínclito Jose Luis Ábalos. No sé si se la pasa como a mí, pero cada vez que veo a este señor y al ya famoso Koldo, recuerdo a Torrente. Lo mismo Santiago Segura se inspiró en ellos para crear su personaje chusco, burdo y ordinario.
El mangoneo se está investigando y aparte de a Ábalos, salpica a grandes autoridades como Francina Armengol, que preside del Congreso, pero que antes regía el gobierno de Baleares, mancha al ministro de política territorial, Víctor Ángel Torres, antes presidente de Canarias, toca a Marlaska, el controvertido ministro de interior y a Salvador Illa, quien fuera ministro de sanidad y hoy líder de los socialistas catalanes.