
Asistimos estos días a un episodio político que va más allá de su superficie: la recolección de firmas del PIT-CNT para plebiscitar una reforma constitucional que establece cambios sustantivos en el régimen de seguridad social. La organización sindical, junto al Partido Comunista, se llevan por delante a la mitad del Frente Amplio y se lanzan a esa aventura, generándole un fuerte conflicto interno. Es la consecuencia de un Frente Amplio sin los viejos liderazgos en que, como consecuencia, la visión "clasista" y corporativa de los sindicatos readquiere fuerza protagónica.