
¿Y si satisfacer al cliente está matando tu empresa?
WeWork tenía satisfacción perfecta. Vale cero. Slack convirtió usuarios en revolucionarios. Vale 27 mil millones.
La diferencia: unos sirven clientes, otros reclutan co-conspiradores.
En este episodio exploramos:
La provocación: El cliente no quiere ser servido. Quiere ser cómplice.
Pregúntate: Si tu empresa desapareciera mañana, ¿qué porcentaje de tus clientes intentaría recrear tu producto?
Menos del 10%? No tienes clientes. Tienes rehenes.