
Jahn, se amañó y regresa esta vez a nuestra estación del metro biosegura para abordar un tema que a todos los pobres del mundo nos atañe, pero esta vez no vino solo, porque Camila, hizo un largo viaje para acompañarlo. Luego de un pesado almuerzo El Peñue pone a carburar la cabina con rumbo hacia una parada vomitiva y las técnicas para hablar con un taxista y no morir en el intento de El Gordo.
Súbanse y sosténganse de lo que puedan, porque esta vez, vamos a todo gas.