
En San José, California, la Mansión Winchester se erige como un enigma de la arquitectura, un laberinto de 160 habitaciones creado por Sarah Winchester, la viuda de la fortuna de los rifles Winchester.
Construida para escapar de una maldición que la perseguía, esta casa es más que una atracción turística; es un refugio de dolor y desesperación, donde los ecos de almas perdidas resuenan en sus pasillos. Las historias de susurros, sombras y encuentros sobrenaturales atraen a curiosos y valientes, mientras que la leyenda de Sarah Winchester perdura en cada rincón, esperando que el misterio de su vida y su búsqueda de redención nunca se desvanezca por completo.